Sembrando semillas de curiosidad y cultivar el amor por la naturaleza comienza en la niñez. Involucrando a lo/as niño/as en el proceso de cultivación no sólo les enseña sobre el mundo natural sino también crea un sentido de responsabilidad y conexión con la naturaleza.
Aquí hay algunas ideas sobre cómo involucrar a lo/as niño/as en el proceso de cultivación esta primavera. Nota: compra herramienta para niño/as para que se sientan más bienvenido/as en el jardín y con motivación para ayudar más.
Infancia (edades 0-3)
Exploración sensorial: Los bebés y los infantes prosperan con las experiencias sensoriales y el jardín proporciona un entorno seguro y enriquecedor para la exploración. Mientras participan en actividades de plantación, trae a su pequeño con usted. Ten disponible materiales como tierra, hojas, comestibles, hierbas y flores que los infantes y bebés puedan explorar solos. Esta exploración práctica les permite activar sus sentidos mientras fomenta el amor por el mundo natural.
Desarrollo del lenguaje: El desarrollo del lenguaje es crucial durante los primeros años y la jardinería ofrece amplias oportunidades para experiencias de narración enriquecedoras. Mientras la cultivación del jardín, describe cada paso del proceso utilizando lenguaje descriptivo. Involucre a su infante o bebé hablándole sobre las texturas, colores, y olores de las plantas.
Creando un espacio compartido: Anima a su pequeño/a a comer o tomar siestas en el jardín, reforzando la idea de que ellos son integral en el espacio compartido. Pasar tiempo junto en el jardín ayuda a fortalecer una conexión con la naturaleza desde una edad temprana, mientras fomenta un sentido de propiedad y pertenencia al entorno.
Niñez (edades 3-6)
Exploración sensorial: Para niño/as pequeños, cultivar en el jardín es una experiencia multisensorial. Apoyolo/as a usar sus sentidos con las semillas, insectos, plantas, terra. Usa lenguaje descriptivo para hablar de texturas, colores, olores, y sabores.
Labores simples: Designan tareas pequeñas y realizables donde sus niño/as pueden ser ayudantes. Llenado macetas con tierra, cavando hoyos para plantas, poniendo semillas en los hoyos, echando agua a las plantas (recomendamos que niño/as pequeno/as usen un regaderas y solo tengan pequeñas cantidades de agua disponibles).
Juego sin estructura: Fomenta juegadera en el jardín que no interrumpe el proceso de cultivación. Si las plantas se lastiman en este tiempo, es una oportunidad excelente para enseñarles a lo/as niño/as cómo nutrir una planta para que recupere su salud, fomentando la paciencia en el proceso.
Narración: Incorpora la narración en el proceso de cultivación. Escoge libros con cuentos de jardinería, ciclos de vida, semillas, comida para leer antes, durante o después del proceso de cultivación. Esto ayuda a lo/as niño/as para crear conexiones entre las historias que escuchan y la experiencia actual de la cultivación. Habla con sus niño/as sobre los usos de las plantas y cómo las van a usar en el futuro.
Años Primarios (edades 7-10)
Exploración y descubrimiento: Involucra a lo/as niño/as mayores en la exploración de la ciencia detrás de la plantación. Anímese a hacer preguntas, hacer predicciones y realizar experimentos sencillos, como observar el crecimiento de las plantas o variaciones en diferentes climas.
Responsabilidad y propiedad: Brinde a lo/as niño/as un sentido de propiedad sobre los proyectos de plantación. Permítanos elegir cuáles plantas cultivan y pídales que creen sus propios mapas de diseño de parcelas. Anímese a llevar un diario de jardinería para notar cambios, crecimiento y posibles puntos problemáticos a lo largo de la temporada de cultivación. Darle a lo/as niño/as de esta edad la oportunidad de cuidar sus propias plantas sin intervención. Dar ejemplo con vista de las responsabilidades relacionadas con las plantas pero esté es un oportunidad de la autonomía.
Cultivación complementaria: Presenta el concepto de la cultivación complementaria para enseñarles sobre las interacciones de las plantas y la biodiversidad. Anímalos a investigar qué plantas crecen bien juntas y a planificar su jardín, fomentando el pensamiento crítico y la conciencia ecológica.
La creación de experiencias que inspiren un amor permanente por la jardinería y el cuidado del medio ambiente comienza en casa. Ya sea cavando por la tierra o realizando experimentos científicos, cada etapa de la juventud ofrece oportunidades únicas de crecimiento y descubrimiento en el jardín.
